La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida ♫ cantaba Rubén Blades años atrás y vaya sorpresa la que nos llegó hace tan sólo unas semanas.
Rememorando el post anterior, habíamos dejado la acción en que a la deriva nos encontrábamos buscando casa nuevamente por problemas técnicos-personales-familiares-vivenciales y bueno no la encontrábamos; nos chotearon mil veces, nada de menos de 1 año como alquiler y cuando mi sra. madre mencionaba a todos (craso error al final de la conversación) si aceptaban a nuestra pequeña (risa de Sheldon) Kisa era más que predecible que siguiera un corto, seguro, preciso y rotundo...NO.
Bueno, dejando de lado lo malo...apareció en el preciso momento y para evitarle a mi madre un colapso nervioso arterial con hipertensión agua ... el vecino del 301! Así es señores, si mi tía Susy tiene una vecina malosa del 303 pues nosotras tenemos a mi vecino cuasi santo, pre beatificado por mi mamá del 301 quien con sonrisa simpaticona y bonachona acepto alquilarnos su depa en el tiempo que lo consideremos necesario (#yamehueleraro) y en las condiciones que nosotros consideremos adecuadas. Facil mi vieja le metió un floro maldito mortal nuclear a la n potencia más 1 que terminó por convencerlo así no más en menos de media hora.
Pues bien, empieza la procesión nuevamente de cajas y cajas, bolsas y bolsas y sepan ustedes qué se nos perderá esta vez pero el punto es que gracias a este señor que no tengo el gusto de conocer hasta ahora todas respiramos tranquilas y solamente estamos a la espera de decirle adiós a las alturas del 802 y decirle hola al 301 por algunos meses.
Vamos por el 1er mes recién de los 9 que dijimos es este parto hacia la felicidad de la casita propia.
Este primer mes felizmente solo nos trajo alguito de mal humor.
"Ladran Sancho, señal que avanzamos".